Contracción habitual, repetida y rápida de ciertos músculos, que produce acciones individualizadas estereotipadas que pueden suprimirse voluntariamente sólo por períodos breves. A menudo afectan la cara, cuerdas vocales, cuello, y con menor frecuencia a las extremidades. Entre los ejemplos se incluyen limpieza repetitiva de la garganta, vocalizaciones, olfateo, contracciones de los labios, y masticación excesiva. Los tics tienden a agravarse por el estrés emocional. Cuando son frecuentes suelen interferir con el habla y con las RELACIONES INTERPERSONALES. Las afecciones que se caracterizan por tics frecuentes y prominentes como manifestación fundamental se conocen como TRASTORNOS DE TIC. (Traducción libre del original: Adams et al., Principles of Neurology, 6th ed, pp109-10)