Una forma de discriminación en el centro de trabajo que infringe el Acta de los Derechos Civiles norteamericana de 1964. El acoso sexual tiene dos variantes: quid pro quo, cuando el empleado debe someterse a insinuaciones sexuales a cambio de beneficios en el trabajo o es penalizado si se resiste; o un ambiente hostil, cuando la atmósfera del centro de trabajo es ofensiva y afecta el bienestar del empleado. La conducta sexual ofensiva puede incluir las insinuaciones sexuales, comentarios y roces indeseables, preguntas sobre el estado civil y prácticas sexuales, etc. Tanto el hombre como la mujer pueden ser agresores o víctimas. Aunque la legislación de los derechos civiles aborda el acoso sexual en el centro de trabajo, esta conducta no se restringe a este contexto y puede presentarse fuera del ambiente de trabajo: en escuelas y universidades, asociaciones de atletas y otros entornos y actividades sociales.