Fuentes animadas o inanimadas que normalmente albergan organismos causantes de enfermedades y por tanto sirven como fuentes potenciales de brotes de enfermedad. Los reservorios se diferencian de los vectores (VECTORES DE ENFERMEDADES) y los portadores, que son agentes de transmisión de enfermedades más que fuentes continuas de brotes potenciales de enfermedad.