Fármacos antiinflamatorios que no son esteroides. Además de tener efectos antiinflamatorios, tienen efectos analgésicos, antipiréticos e inhibidores de las plaquetas. Se usan sobre todo en el tratamiento de afecciones artríticas crónicas y ciertos trastornos de los tejidos blandos asociados a dolor e inflamación. Actúan bloqueando la síntesis de prostaglandinas a través de la inhibición de la ciclooxigenasa, que convierte el ácido araquidónico en endoperóxidos cíclicos, precursores de las prostaglandinas. La inhibición de la síntesis de prostaglandinas se asocia a su efecto analgésico, antipirético e inhibidor de las plaquetas; otros mecanismos pueden contribuir a sus efectos antiinflamatorios. Ciertos AINE también pueden inhibir las lipooxigenasas o las FOSFOLIPASAS DE TIPO C o pueden modular la función de los linfocitos T. (AMA Drug Evaluations Annual, 1994, p. 1814-5)