Dos plexos nerviosos ganglionares en la pared del intestino que forma una de las tres divisiones principales del sistema nervioso autónomo. El sistema nervioso entérico inerva el tracto gastrointestinal, el páncreas y la vesícula biliar. Contiene neuronas sensoriales, interneuronas y neuronas motoras. De tal forma, los circuitos pueden sentir automáticamente la tensión y el ambiente químico en el intestino y regular el tono de los vasos sanguíneos, la movilidad, las secreciones y el transporte de fluidos. El sistema en sí mismo está regulado por el sistema nervioso central y recibe inervaciones parasimpáticas y simpáticas. (Kandel, Schwartz and Jessel, Principles of Neural Science, 3d ed, p766)